sábado, 17 de abril de 2010

Cronos se cabreo, porque consegui parar el tiempo
Que llevaba el estipulado en sus manos,
Y con gran abversion no puedo detener que yo pudiera pararlo…
Zeus rugio al ver que mis latidos retumbaban mas que sus propios truenos…
Hades enrojecio, viendo que mi temperatura corporal era mas alta que sus propias llamas…
A Afrodita se le partio el alma al ver que mi fuerte corazon superaba todo su gran amor…
Apolo se hundio en la oscuridad viendo como mis ojos daban y atrapaban mas luz de la que el podia dar y beneficiar…
Ares fue desterrado por Zeus al no poder vencerme en batalla…
Los dioses se juntaron y decidieron darme a beber cicuta… pues no podian ver como un simple mortal podia tener mas poder que un propio dios…
Con un ramo de flores de algodón y con trozos de corazon, te lo entregue entre la infatigable mirada de los dioses…
Pues ni Hercules podia pararme los pies, encima de la boveda celeste, en el que mi mirada permanecia fija en tu mirada en tus ojos en los que reflejados me veia y apenas lo decia…
Las Grayas estirando el hilo de la vida se dispusieron a arrebatartela… mientras cogian las tijeras en desdicha, me abalance sobre ellas y de una patada, tire su ojo al abismo negro de Hades, mientras jadeaban e imploraban a las almas, que flotaban en penas y caudales…
Logre salvarte de ellas, logre apartarte de esas brujas, pues no quise que te hicieran caer en desdicha… limpie tus lagrimas y de una patada, surcamos las estrellas y cometas….
Cerbero nos quiso morder, pero nuestra fuerza era tan poderosa que quedo con sus cabezas enrevesadas y bramando caos e ira, entre flores del infierno lilas…
Los Faunos tocaban la flauta, los centauros corrian en manada y las hadas… las hadas solo tenian envidia del perfil de tu alma…
Al paso de un verde prado aparecio Equidna, que me atrapo como tal serpiente venenosa… me mantuvo apretado y sonrojado que ni siquiera un poeta podria relatarlo en prosa…
Con un movimiento salvaje de tu cabello me solto y abatida huyo…
Vaya! Sus cabellos eran armas de acero, que a simple vista parecia indefensos pero que ni Medusa se atreveria a tocarlos… ni a plantarte cara, entre el inframundo de los lirios prohibidos del manantial de sombra del ancho mar…
Cabello como el fuego, que moveria ejercitos enteros, que por un beso podrias convertir en piedra, y seguir reyertas..
De dioses, de cielos, de mundos que llego hasta el mismisimo inframundo..
Y parece que hayamos tomado la luna, porque la piel cada dia esta mas palida y parece que este en hambruna…
Vaya envidia tenia Afrodita.. al ver que poco a poco estaba abatida..
Pues al final un simple mortal desafio a los dioses e hizo ver que su corazon tenia un gran valor.

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